miércoles, 27 de febrero de 2019

El Auge de las Marcas Propias en Colombia

 “No siempre la marca propia es sinónimo de precio bajo ni se asocia necesariamente al nombre de la cadena”.

Una marca propia, es el nombre que un distribuidor atribuye a sus productos para venderlos en sus propios puntos de venta. También denominada marca blanca o marca del distribuidor, es una estrategia de oferta que busca reforzar —mediante el uso del mismo nombre o de cualquier otro— la identidad de marca del establecimiento.

Las marcas propias se posicionan como una tendencia en auge, de amplio uso en el sector retail, son marcas que manejan precios inferiores a las de sus competidores (marcas líderes), de ahí que, en algunos casos, las cataloguen como marcas económicas.  Para Carlos Gómez, Vicepresidente Comercial del Grupo Éxito, la dinámica propia del mercado y la gran calidad con la que los proveedores desarrollan los productos, han convertido a muchas de estas marcas en referentes del sector.
Un estudio de Kantar Worldpanel realizado en 2015, evidenció que las razones por las que los colombianos, consumen marcas propias, son: precio, variedad y calidad. Aún en estratos de alto poder adquisitivo. Además, porque son productos que tienen una alta probabilidad de entrar en promoción. De acuerdo con esta firma, 9 de cada 10 hogares se inclinan por las marcas propias.

Por lo anterior, en los últimos años, las marcas propias en Colombia se han disparado; este ascenso está muy ligado al hecho de que se convirtieron en una ventaja competitiva, pues su precio puede ser hasta un 30% menor que el de las marcas tradicionales o líderes del mercado, lo que definitivamente atrae compradores en época de crisis. Es por ello que todos los supermercados del país han fortalecido el desarrollo de sus propias marcas. (Tomado de revista Dinero, 2001).

Cada vez más colombianos prefieren lo que las cadenas de grandes supermercados les ofrecen en términos de marcas propias. Las razones: dificultades económicas, confianza de consumo y descuentos. El hecho de brindar una serie de productos en alimentos y bebidas o artículos de aseo a precios más bajos, está siendo muy atractivo para los compradores colombianos (El Colombiano, 2018).

Los distribuidores de productos en Colombia dan tres razones para sustentar el éxito de las marcas propias a nivel nacional: el uso de la capacidad instalada, el estrechar los lazos con el distribuidor y el ir acorde a la tendencia del mercado.

Las conclusiones anteriores se desprenden de un estudio realizado por Fenalco acerca de las marcas propias en Colombia. La entidad señala que “las llamadas marcas propias o del distribuidor continúan teniendo gran aceptación en el consumidor colombiano”.

Ray Miller Franco, jefe de desarrollo sectorial de Fenalco Atlántico, opina que el auge de las marcas propias se basa en que la gente las considera menos costosas. “En el subconsciente está que las marcas propias son económicas”, indica.

Agrega que, “esta clase de productos abarcan una porción cada vez más amplia dentro del mercado”. Un elemento que sustenta el posicionamiento actual de las marcas propias es la afinidad y sensación de confianza que esta clase de productos generan en quienes los consumen.

De ahí, que tanto productores como distribuidores perciban el negocio como un gana-gana. Gana la industria, por los volúmenes de ventas que asegura a precios más económicos, además de ahorrar en gastos de publicidad y de distribución, que pueden llegar al 30% del valor de los artículos.

De igual manera, gana el supermercado, porque puede vender amplios volúmenes, y así alcanzar una mayor participación. Por último, hay un ganador mayor, el cual es el cliente, gana éste, porque compra unos bienes a bajos precios, de buena calidad y con la garantía de la cadena que lo está vendiendo.
Para garantizar que las empresas colombianas jueguen en el mercado de las marcas propias, la Superintendencia de Industria y Comercio ofrece acompañamiento y vigilancia en este proceso (El Heraldo, 2015).

Los productos marca propia de algunas compañías son elaborados por fabricantes que en su gran mayoría son colombianos, es ahí donde las pymes juegan un papel trascendental, pues no solamente pueden ser los proveedores de grandes plataformas, sino que, a su vez, generan valor y empleo. Lo importante es que en este tipo de recursos la marca propia debe ser considerada como una oportunidad de generar identidad, posicionamiento y un aporte positivo en torno a la misma, al ofrecerle al consumidor productos de calidad a un precio que le favorezca (Fenalco, 2008).

Estas marcas están dirigidas a un target compuesto de diversos grupos de clientes que le dan prelación al precio, a la calidad, a la marca o a las tres, de forma simultánea; por lo cual, podemos encontrar marcas propias con precios altos, cuyo objetivo principal es posicionar el nombre de la cadena, y están dirigidas a aquellos clientes, que sin importar el precio, adquieren un producto costoso, pero con el respaldo y el sello de calidad de una cadena prestigiosa, a su parecer, en la que confían plenamente y que siempre les ofrece los más altos estándares sin importar el costo. Por esto es habitual que clientes de este tipo prefieran las marcas propias en categorías como carnes maduradas, quesos especiales, frutas, verduras, especias, que aunque tienen un precio superior al estándar, tienen el respaldo de calidad del almacén.

En el otro extremo encontramos aquellos clientes que dan prelación al precio, que basan su decisión de compra por la marca que les ofrezca el producto más barato sin tener en cuenta la calidad; por lo tanto, encontramos categorías en las que la marca del almacén es líder, debido a que ofrece un precio más bajo que las otras marcas.

Por consiguiente, las cadenas de almacenes que, dentro de sus estrategias de marketing, introducen la venta de marcas propias en sus espacios comerciales, deben exhibir dichos productos, en zonas adecuadas, en las que resalten y se distingan, de los demás productos del lineal.
Para Carlos Grande, experto en marketing, uno de los componentes de esa estrategia, es colocar esos productos en las zonas calientes del almacén. Por lo general, estos se encuentran a la altura de los ojos del consumidor, en uno de los lugares más concurridos del establecimiento comercial, incrementando así la probabilidad de venta.

Otra de las acciones más comunes en ese sentido es incluir las marcas propias en los días donde el almacén programe jornadas especiales de descuento, aumentando el ahorro del consumidor.

Por otra parte, el auge de las marcas propias en Colombia, ha traído consigo, la práctica de un nuevo tipo de exhibición, con el que se busca darles protagonismo a los productos de dichas marcas.

A las exhibiciones tradicionales, como la vertical, horizontal, en bloque, a doble franja y mixta, se suma la exhibición en red, la cual consiste en ubicar las marcas propias en el centro de las góndolas y muebles, y a su lado los productos de mayor reconocimiento o trascendencia comercial en el mercado.

Se busca así, que las marcas de mayor atracción lleven al consumidor a la góndola, y ya allí, por esa atracción, la marca propia tenga la oportunidad de ser vista y seleccionada, según su categoría, precio, tamaño, cantidad, calidad y demás factores, que le sean favorables.

Un suceso muy común en los supermercados de Colombia consiste en que algunos consumidores tienden a tener este comportamiento en ciertas categorías, dependiendo del nivel de importancia que tienen los productos en su lista de necesidades; por ejemplo, en cuanto a los productos de aseo del hogar, limpiadores de pisos y todos aquellos artículos relacionados con la limpieza, el consumidor suele dar mayor relevancia al factor precio, y deja de lado características como prestigio de la marca, calidad u otras características adicionales, las cuales no tienen importancia para él a la hora de comprar este tipo de productos; es entonces donde las marcas propias de precios bajos ascienden a líderes de categoría.

Finalmente, encontramos aquellos consumidores que buscan pagar un precio razonable por productos de buena calidad; es entonces en esta categoría en la que las marcas propias ofrecen productos de buena calidad a precios más bajos que los estándares. En el pasado, el consumidor colombiano en general tenía la percepción de que la marca propia era sinónimo de baja calidad, pero con el arduo trabajo de posicionamiento y mercadeo que han realizado las grandes superficies y supermercados, este paradigma está casi anulado; los clientes se dieron cuenta, que las marcas conocidas del mercado, son las mismas que producen, fabrican o envasan, las marcas propias de los supermercados, es decir, compran la misma calidad de las marcas prestigiosas, con otro nombre, pero a un menor precio.

No en vano, cadenas de almacenes como Olímpica, Éxito, Makro, Alkosto, Justo y Bueno, Ara, Farmatodo, Jumbo y otras, comercializan sus propias marcas, llevándolas incluso, a explorar e incursionar, nuevas categorías de productos, tales como las del cuidado personal femenino. Un ejemplo es el caso Ara, con Be Beauty Care.

Para Germán Barreto, director de marcas propias de Ara:
“Algo fundamental en nuestro modelo de negocio es ofrecer los mejores precios del mercado. Nuestro portafolio tiene una combinación perfecta entre las marcas de industria y las marcas propias. Estas últimas tienen una importancia estratégica para nosotros porque Ara le quiere dar al consumidor colombiano acceso a todo tipo de productos, no solo de alimentación y no alimentación. La palabra clave es democratizar el acceso a este tipo de productos. Esto significa que las personas los puedan comprar y eso se traduce en un precio imbatible, el mejor del mercado con diferencias de 20 a 40% frente a lo que las personas estaban acostumbradas a adquirir”.

Martín Nova, gerente de mercadeo de Almacenes Éxito, reconoce la relevancia que le están dando las cadenas a las marcas propias. “En el caso del Éxito, hay mayor inversión publicitaria, estrategias de mercadeo directo y creación de una línea de servicio al cliente para responder a las inquietudes del consumidor”, señala (Tomado de la revista Dinero, 2009).

En definitiva, hoy en día, Colombia no escapa al fenómeno de las marcas propias, a la fecha, en el país, los hipermercados, supermercados y demás formatos de retail, como actores de la cadena de abastecimiento y distribución, comercializan alrededor de 20.000 referencias de productos, pertenecientes a sus marcas propias, con las que llegan a un 98% de los hogares nacionales, que posicionan a Colombia como el país líder de la región en el segmento de marcas propias.



Referencias:


martes, 19 de febrero de 2019

Investigación e Información de mercado como base para la toma de decisiones comerciales

“La información es el ADN de toda investigación de mercado, base fundamental en la toma de decisiones y el diseño de las estrategias de marketing”.
Campo Elías Camacho Marín.

Solo aquellas empresas que tengan conocimiento de su mercado, de sus clientes y de su competencia pueden llegar a ser exitosas a largo plazo. La existencia de una competencia cada vez más fuerte, ha hecho de la investigación y la información de mercados, la base para la toma de decisiones comerciales. 

En el contexto empresarial, la información se gestiona, a partir de un sistema de información de mercado (SIM), el cual le permite a la organización apoyar y fundamentar sus decisiones. El propósito es obtener información amplia, relevante y actualizada sobre situaciones de mercado, como base para definir objetivos y planes de acción en beneficio de las compañías.

Un sistema de información de mercados consta de personal, equipos y procedimientos para reunir, clasificar, analizar, evaluar y distribuir información necesaria, oportuna y exacta para el personal responsable de tomar decisiones de mercado. 

Para que una decisión sea positiva, es necesario reunir información precisa, concisa y de calidad. En tal sentido, es pertinente diseñar, al interior de la organización, un proceso de sistematización de la información, en el que se disponga de información relevante. Es decir, un sistema que almacene la información clave del mercado y de los clientes, con el que la gerencia administre el conocimiento para llevar a cabo lo que se propone.

Conviene subrayar, que:

“La información es la materia prima y fundamental en la toma de decisiones de los analistas en una organización ya que, a mayor calidad de información, mejor es la calidad en la toma de decisiones”.

Por otro lado, para recopilar la información, la empresa cuenta con dos (2) tipos de fuentes. La primaria y la secundaria, lo que permite clasificar la información de igual manera. De modo que, podemos hablar de información primaria y de información secundaria.  

La primaria implica trabajo de campo, entrevistas y demás estrategias para responder a factores como tendencias, competidores del mercado, opinión de los consumidores sobre los productos y el servicio, innovación, cambios y demás aspectos inherentes a la comercialización. 

La secundaria se basa en información obtenida de fuentes externas, es información existente disponible en entidades del Estado, periódicos, revistas, internet, gremios y demás organismos relacionados con el tema objeto de estudio a tratar. Dicho de otra manera, es información fabricada que sirve de sustento y argumento.

La información comercial que se integra a un sistema de información de mercado (SIM), proviene de las siguientes fuentes:

1. Información Interna de la empresa
Como su nombre lo indica, es información que genera la misma empresa, permite conocer el comportamiento de las ventas Vs. metas establecidas, su aumento o disminución en comparación a periodos anteriores. De igual manera, permite conocer la participación de mercado lograda en el sector de desempeño. Esta información es valiosa, en la medida que le facilita al empresario medir la efectividad de la gestión gerencial, así como la de las estrategias implementadas. Lo que, a su vez, permite realizar los cambios pertinentes a la luz de los resultados y las perspectivas del entorno en que operan estas empresas. Esta información proviene de los clientes, los empleados, los vendedores, entre otros.

2. Información del entorno del mercado
En todo proceso de toma de decisiones se necesita información externa. Sin embargo, para que dicha información pueda ser dirigida por los gestores requiere que sea tratada internamente. Además, es necesario que la información pueda fluir por los canales de la empresa para que obtenga el máximo provecho por parte de la organización (Cañavate, 2003).

Tal cual como lo indica su nombre, este tipo de información proviene del entorno, tanto micro como macro de la organización. Del microentorno se extrae información de la competencia, los proveedores, los intermediarios financieros, los consumidores y sus comportamientos hacia los produservicios de la empresa. Conocer los públicos cercanos a la empresa le da la oportunidad de tener mejor visión comercial. Su integración a la empresa es fundamental, de manera que se disponga en los momentos requeridos.

Toda esta información de las que puede disponer el gerente, se considera información de carácter secundario porque en la mayoría de las veces ya ha sido elaborada con otros fines, pero que puede ser usada por la gerencia en los momentos que lo requiera. 

3. La investigación del mercado
Es un enfoque eficaz para la búsqueda de respuestas a nuestras preguntas sobre los consumidores y su comportamiento hacia los productos y servicios. Permite conocer el impacto de un producto, una marca o negocio, en ellos. Cómo lo perciben y qué imagen tienen de él.

Al respecto muchos autores, entre ellos Philip Kotler (2003), plantean que es el proceso de recopilación, procesamiento y análisis de información, respecto a temas relacionados con la Mercadotecnia, como clientes, competidores y mercados.

Para Herrmann, Homburg y Klarmann (2008) la investigación de mercados es la recolección, procesamiento, análisis e interpretación sistemáticos de datos sobre eventos del mercado, y que son solicitados en determinadas circunstancias por las empresas.  

La investigación de mercados ayuda a crear el plan estratégico de la empresa, preparar el lanzamiento de un producto, apoyar y sustentar el desarrollo, actualización e innovación del portafolio de productos existente de una empresa, según etapa y ciclo de vida en que se encuentren.

“No se puede lanzar un nuevo producto al mercado sin una Investigación de Mercados, es como lanzarlo al mar sin que flote, la Investigación de Mercados equivale a su salvavidas”.


Como herramienta del mercadeo, entre sus propósitos, la investigación de mercados, les facilita a las compañías tomar decisiones sobre qué mercados incursionar, penetrar y desarrollar. La investigación de mercados debe ser preventiva y no reactiva, lo que indica que no hay que recurrir a ella, solo en las dificultades. 

Las funciones de la investigación de mercados son: Estimular, pronosticar, evaluar, controlar y verificar.

Una lista básica de posibles preguntas que se pueden responder a través de la investigación de mercados es:

1.     ¿Qué está ocurriendo en el mercado?
2.     ¿Cuáles son las tendencias?
3.     ¿Qué está de moda?
4.     ¿Quiénes son los competidores?
5.     ¿Cómo están posicionados nuestros productos en la mente de los consumidores?
6.     ¿Qué necesidades son importantes para los consumidores?
7.     ¿Las necesidades están siendo cubiertas por los productos en el mercado?

Por último, se puede afirmar que las grandes decisiones empresariales, en general, han sido tomadas por directivos con una visión clara de la necesidad de la información como apoyo, aplicando para ello, las acciones requeridas para su consecución. Para lo cual, han ideado los instrumentos necesarios para su obtención y análisis.

De ahí que, “La Investigación de Mercados nos lleva de la información al análisis y del análisis, a la decisión”.


Referencias


martes, 5 de febrero de 2019

Estrategias de Mercado


“Tu mejor mercado es aquel que tu competidor no posee”.
Campo Elías Camacho Marín


El mercado es de riesgo y de oportunidades. El riesgo tiene que ir acompañado de una oportunidad bien fundamentada: estudio de factibilidad basado en el potencial de mercado.

Una estrategia de mercado es un plan de acción que realiza la empresa para alcanzar objetivos de mercado. Se aplican para crecer (ganar participación de mercado), mantenerse (conservar ventas) o decrecer (con la obsolescencia programada) para sacar paulatinamente de circulación un producto del mercado.
El propósito de las estrategias de mercado es el de brindar a la empresa u organización una guía útil acerca de cómo afrontar los retos que encierran los diferentes tipos de mercado; por ello, son parte de la planeación estratégica a nivel de negocios (Thompson, 2006)

El mercado es un océano de peces (clientes) a los que hay que atraer, conquistar y fidelizar, los hay de todo tipo, por ende, las empresas deben identificar a qué mercados pertenecen, cuáles son sus gustos, preferencias y estilos de vida, por lo que es vital que hoy en día, más que segmentar, microsegmentemos, para llegar a aquellos clientes, cuyas esferas de mercado, son únicas, como ellos. 

Por lo anterior, las estrategias de mercado representan para las organizaciones, su continuidad y permanencia. De una estrategia eficaz de mercado, se mantienen clientes satisfechos y leales. Igualmente, de su aplicación depende la participación y el crecimiento de la empresa en el mercado.

¿Pero qué estrategia de mercado es la más recomendable? ¿Hacia dónde debe estar orientada la empresa para tomar decisiones de mercado? El desarrollo de una estrategia implica un proceso que conlleva a tres etapas fundamentales: 

1. Formulación de la estrategia
2. Implementación de la estrategia
3. Evaluación de la estrategia

Por otra parte, la orientación de la empresa y los objetivos de mercado, definen el tipo de estrategia a implementar. Adoptar una orientación de mercado, implica que las decisiones que toma la empresa se centran hacia fuera, con un flujo continuo de información sobre clientes, competidores y tendencias del mercado, lo que garantiza tomar decisiones basadas en situaciones reales del mercado.
Así, una organización orientada al mercado, es visionaria, razón por la cual, debe desarrollar innovación, evolucionar a la par del mercado, anticiparse a las tendencias y realidades del entorno, a prever los cambios constantes que se suscitan en él. De no ser así, puede verse abocada a desaparecer, porque sus productos quedan obsoletos, motivo por el cual, pierden demanda. Casos como los de Kodak y Blockbuster, son ejemplos puntuales de esta situación. 

Ahora, en cuanto a una estrategia de mercado puntual, la empresa debe decidir su aplicación según los objetivos a conseguir lo que le permitirá lograr una ventaja competitiva sostenible. Entre las más aplicadas, tenemos:
-Estrategias de Crecimiento Intensivo: ideales para empresas que se desenvuelven en mercados que aún no han sido explotados en forma exhaustiva. Se dividen en:
  • Estrategia de penetración en el mercado
  • Estrategia para desarrollar el mercado
  • Estrategia para desarrollar el producto
-Estrategias de Crecimiento Integrador: recomendadas para aquellas empresas que gozan de cierto prestigio en el mercado, ya que, al hacer uso de éste, puede llegar a controlar, tanto a distribuidores, como a proveedores. Se clasifican en:
  • Integración regresiva
  • Integración progresiva
  • Integración horizontal
-Estrategias de Crecimiento Diversificado: perfectas para aquellas empresas que actúan dentro de un mercado que se encuentra bastante saturado. Su objetivo es la expansión hacia nuevas posibilidades de mercado. Se componen de:
  • Diversificación centralizada
  • Diversificación conglomerada
  • Diversificación horizontal
-Estrategias para Liderar el Mercado: son las estrategias que utilizan las grandes empresas, cuya consolidación es innegable, su propósito es seguir creciendo, a pesar de contar con éxito en el mercado. Se basan en:
  • Estrategia basada en la cooperación
  • Estrategia basada en la competitividad
-Estrategias para retar a los Líderes del Mercado: tal como lo indica su nombre, las empresas que aplican estas estrategias intentan quitarles el dominio del mercado a grandes empresas. Se dividen en:
  • Estrategia para un ataque directo
  • Estrategia para un ataque dirigido a puntos débiles
  • Estrategia para un ataque derivado
-Estrategia de Seguimiento del Mercado: se basa en benchmarking, imita las estrategias de las grandes marcas, adaptando fortalezas y ventajas de los líderes del mercado.  

A la anterior lista, podríamos seguir añadiendo otros nombres de estrategias de mercado. La selección y aplicación de la estrategia precisa depende del mercado meta de la organización, así como de factores propios del mercado, tales como: Extensión territorial del mercado, Carácter del mercado, Potencialidad del mercado, Limitación del mercado, Estado de la competencia, entre otros.

Por otra parte, la selección del mercado meta condiciona la mezcla de mercadeo a desarrollar, por lo que es necesario, antes de posicionar, segmentar. De manera que, ningún mercado es difícil de alcanzar, si se divide en pequeños segmentos (Camacho, 2017).

En resumen, un subsegmento es el punto de partida de la empresa para una posterior expansión hacia otros segmentos del mercado.

De acuerdo con Alberto Cespedes Saenz, Principios de Mercadeo (2010), las compañías generalmente consideran cualquiera de las siguientes cinco (5) estrategias de cobertura del mercado:
  • Concentración producto/mercado: consiste en que la compañía consigue para sí un nicho en solamente una parte del mercado.
  •  Especialización del producto: consiste en que la compañía decide producir solamente un tipo de producto para todos los grupos de clientes.
  • Especialización del mercado: la compañía decide fabricar una variedad de productos que sirvan a las necesidades de un grupo particular de clientes. (por ejemplo, clientes industriales).
  • Especialización selectiva: la compañía introduce varios productos al mercado que no tienen relación con ningún otro, excepto que cada uno provee una oportunidad atractiva individual.
  • Cobertura total: la compañía fabrica una escala completa de productos que sirvan para todos los segmentos del mercado.